Cristianos y políticos han hecho un llamado a la oración después de que el activista conservador Charlie Kirk perdiera la vida tras recibir un solo disparo el miércoles por la tarde.
En cuestión de horas, se enteraron de que Kirk, director ejecutivo de Turning Point USA (TPUSA), de 31 años de edad, había fallecido, y sus oraciones iniciales por su recuperación se convirtieron rápidamente en expresiones de luto por el líder y en repudio ante la violencia que le quitó la vida.
Kirk estaba hablando desde una carpa ante miles de estudiantes reunidos en el patio de la Universidad Utah Valley cuando una bala le atravesó el cuello y cayó al suelo.
Según informes de la universidad, el tirador disparó desde el edificio del centro de estudiantes, a unos 200 metros de distancia. Hacia las primeras horas de esta noche, la policía había interrogado y puesto en libertad a dos personas, pero no había identificado públicamente a ningún sospechoso.
El presidente Donald Trump y el vicepresidente JD Vance recordaron a Kirk, una de las voces conservadoras jóvenes más conocidas del país y amigo de la administración. El presidente publicó en Truth Social: «Nadie entendía o tenía el corazón de la juventud de los Estados Unidos de América mejor que Charlie».
«Charlie fue asesinado mientras trabajaba para persuadir pacíficamente a otros», escribió la activista provida Lila Rose. «Que su testimonio nos llame a rechazar el odio y la violencia, y a abrazar el poder de la verdad expresada con amor».
Este asesinato se produjo en medio de una sensación de creciente de violencia política en Estados Unidos, que incluye el asesinato de una legisladora demócrata en Minnesota en junio y un intento de asesinato contra Trump durante un mitin de campaña en Pensilvania el año pasado. El pastor texano Jack Graham, asesor evangélico de Trump, calificó a Kirk de «mártir».
Kirk era un cristiano evangélico, y su esposa, Erika, dirige una marca de ropa cristiana y un proyecto de lectura de la Biblia llamado Biblein365. Ella publicó en X un pasaje de los Salmos: «Dios es nuestro refugio y nuestra fortaleza, nuestra segura ayuda en momentos de angustia» (NVI).
En las redes sociales, donde Kirk tenía millones de seguidores, su muerte provocó reacciones tanto de cristianos que apreciaban sus ideas políticas como de aquellos que no estaban de acuerdo con él.
Calificaron su asesinato de atroz y espantoso. Pidieron oraciones por su esposa y sus dos hijos, y compartieron fotos y videos de la joven familia. Además, expresaron su inquietud por el clima político actual, la retórica y la violencia.
En una encuesta realizada el año pasado, la mayoría de los votantes estadounidenses (66 %) dijeron estar de acuerdo con que la amenaza de la violencia política era un problema importante en Estados Unidos, siendo los seguidores de Trump los más preocupados (74 %).
El movimiento de jóvenes conservadores de Kirk creció significativamente durante el primer mandato de Trump y se expandió a alrededor de 800 campus, incluidas docenas de escuelas cristianas.
Muchas de las representaciones universitarias de TPUSA organizaron vigilias en memoria de Kirk el miércoles por la noche, reuniéndose con velas y carteles. Sus seguidores lo consideraban un héroe de la libertad de expresión en los campus; los estudiantes compartieron cómo se interesaron por la política conservadora y hablaron abiertamente de su fe como resultado de los diálogos de Kirk.
En la Universidad Liberty en Virginia, donde Kirk tenía previsto dar una charla en octubre, cientos de personas se reunieron para escuchar a los líderes estudiantiles y al rector Jonathan Falwell. Se agruparon para orar en las escaleras y el césped frente al centro de estudiantes, mientras un cantante interpretaba «Amazing Grace» [«Sublime gracia»].
Kirk era popular, pero Turning Point USA también ha sido motivo de división. En su sitio web, la organización insta a los conservadores a «tomar las armas en la guerra cultural». Algunos profesores denunciaron acoso después de que se publicara una lista de vigilancia para exponer la «propaganda izquierdista» en las aulas universitarias.
Kirk se había asociado con Jerry Falwell Jr. para crear el Falkirk Center for Faith and Liberty en la Universidad Liberty antes de que TPUSA iniciara su propia rama religiosa en 2021. Esta última, TPUSA Faith, se propone «unir a la Iglesia en torno a la doctrina primaria y eliminar la concienciación social [movimiento woke] de los púlpitos estadounidenses». Ofrece clases de ciudadanía bíblica, cursos para pastores y eventos para iglesias.
La Universidad Utah Valley en Orem fue la primera parada de la gira «American Comeback Tour» de Kirk, con eventos planeados en diez ciudades en septiembre y octubre.
La universidad le dijo a The New York Times que seis agentes del departamento de policía de la universidad trabajaron en el evento, además del equipo de seguridad de Kirk. El jefe de policía Jeff Long dijo: «Intentas cubrir todas las bases y, por desgracia, hoy no lo hemos conseguido. Por eso, hemos tenido este trágico incidente».
Los representantes de TPUSA de la universidad habían venido portando camisetas de «American Comeback» y gorras de «MAGA» durante semanas mientras promocionaban el evento con carteles, videos y un recorte gigante de la cabeza de Kirk.
Kirk estaba atendiendo su mesa «Prove Me Wrong» (Demuéstrame que me equivoco), respondiendo a las preguntas del público en el campus de Orem, Utah. Según las noticias y las imágenes grabadas durante el incidente, estaba respondiendo a una pregunta sobre los tiroteos masivos cuando se produjo el disparo.
«Charlie Kirk sacó a la generación Z de la pasividad. Le debemos mucho», escribió el pastor bautista del sur Dean Inserra tras la muerte de Kirk.
Esta es una noticia de última hora y será actualizada.
