Durante las últimas semanas, Alistair Begg, pastor de la Iglesia Parkside de Chagrin Falls, Ohio, y presentador del programa radiofónico Truth for Life, se ha visto envuelto en lo que él llama «una tormenta en una taza de té» por un consejo que dio sobre asistir a una boda LGBTQ.
Ese consejo, dijo en un sermón el último fin de semana de enero, tenía como base el mandato de Jesús a los cristianos de amar incluso a aquellos con quienes no están de acuerdo o a quienes desaprueban [enlaces en inglés].
«Jesús dijo que debes amar a tus enemigos», dijo Begg, basándose en una serie de textos bíblicos para afirmar que los cristianos deben mostrar compasión —y no condena— por quienes se han descarriado.
El sermón fue una respuesta a la polémica suscitada por los comentarios que Begg hizo durante una entrevista promocional de un libro el pasado otoño, que recientemente se hicieron virales en las redes sociales. Durante la entrevista, Begg habló con una mujer cuyo nieto se iba a casar con una persona transgénero. Begg, que se opone a las bodas entre personas del mismo sexo, le sugirió que fuera a la boda y llevara un regalo. Al hacerlo, demostraría su amor por su nieto, aunque no aprobara la boda.
«Puede que tu amor por ellos los pille desprevenidos, pero tu ausencia simplemente reforzará el hecho de que digan: “Esta gente es lo que siempre he pensado: sentenciosos, críticos, y no están preparados para tolerar nada”», dijo el pastor evangélico. Añadió que los cristianos tienen que asumir riesgos al mostrar amor a quienes los rodean.
Los comentarios de Begg desataron una tormenta entre algunos de sus seguidores y partidarios, sobre todo entre los calvinistas conservadores y otras comunidades evangélicas. Los evangélicos blancos siguen siendo uno de los grupos religiosos estadounidenses con menos probabilidades de apoyar el matrimonio entre personas del mismo sexo, según el Public Religion Research Institute (PRRI).
El 38 % de los evangélicos blancos dicen apoyar el matrimonio entre personas del mismo sexo, según el PRRI. En cambio, el 87 % de quienes afirman no tener una afiliación religiosa, el 81 % de los judíos, el 77 % de los budistas, el 77 % de los protestantes blancos de denominaciones tradicionales y cerca de tres cuartas partes de los católicos aprueban el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Begg tenía previsto hablar en marzo en la Shepherds Conference [Conferencia de Pastores], una importante reunión de pastores evangélicos reformados dirigida por el pastor y escritor californiano John MacArthur. Después de que los comentarios de Begg se hicieran públicos, él y MacArthur hablaron y decidieron que la controversia sería «una distracción innecesaria», según un portavoz de Grace to You, uno de los patrocinadores de la conferencia.
«El consejo del pastor MacArthur sobre esa cuestión sería completamente distinto del consejo que Alistair Begg dijo haber dado a esa abuela», dijo Phil Johnson, director ejecutivo de Grace to You a Religion News Service en un correo electrónico. «Así que ambos estuvieron de acuerdo en que era necesario que el pastor Begg se retirara [de la conferencia]».
American Family Radio (AFR), una cadena de emisoras evangélicas, retiró la semana pasada Truth for Life, el programa radial basado en los sermones de Begg, después de que sus consejos resurgieran y se hicieran virales.
También dio lugar a una serie de artículos de otros líderes cristianos, en los que se decía que los cristianos no debían asistir a las bodas LGBTQ. «Después de todo, asistir para mostrar “amor” o evitar ofender es una forma de bendición, solo que sin el nombre», escribió Carl Trueman, profesor de estudios bíblicos y religiosos del Grove City College, para la publicación católica First Things.
Tim Wildmon, presidente de la American Family Association, presentó una emisión especial en la que explicó por qué el grupo se separó de Begg. Wildmon dijo que el ministerio recibió llamadas quejándose de la emisión y se puso en contacto con Begg, cuyo programa de radio había aparecido en AFR durante más de una década.
«El objetivo de la llamada era la reconciliación, pero la reconciliación con la verdad», declaró Walker Wildmon, vicepresidente de la AFA. Añadió que Begg se negó a retractarse de sus comentarios, mismos que Walker Wildmon comparó con un padre que se ofrece a llevar a su hijo alcohólico a un bar.
Un miembro del personal de la Iglesia Parkside dijo a Religion News Service que Begg no ha hecho ningún comentario sobre el hecho de que su programa radial haya salido de AFR.
Begg, quien nació en Escocia y ha vivido en Estados Unidos durante cuatro décadas, declaró que lleva mucho tiempo enseñando que el sexo fuera del matrimonio entre un hombre y una mujer está mal, por lo que le sorprendió la polémica suscitada por sus comentarios y las acusaciones de que había abandonado la enseñanza cristiana.
«Ahora, podemos discrepar sobre si le di un buen consejo a esa abuela, o no», dijo. «No todos los miembros del equipo pastoral piensan que le di un buen consejo».
Durante el sermón, se basó en la parábola del hijo pródigo —que destaca el perdón sobre el juicio— y en la parábola del buen samaritano, que destaca la compasión sobre las pretensiones de santidad. Ambas historias, dijo, muestran el poder de la gracia de Dios.
También se basó en la historia que Jesús contó de un pastor que tenía 100 ovejas y perdió una de ellas, y dejó a las 99 para encontrar a la que se había perdido.
«Les digo que así es también en el cielo: habrá más alegría por un solo pecador que se arrepienta que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentirse», dice Jesús en Lucas 15.
Begg invitó a su congregación a tener cuidado con los cristianos que no parecen dispuestos a mostrar gracia o perdón hacia los demás, y les dijo que desconfiaran de los pastores deseosos de condenar en voz alta a los pecadores. Begg dijo que cuando dio ese consejo estaba pensando con su «sombrero de abuelo», con la esperanza de ayudar a esa abuela a mostrar el amor de Dios
«Solo pensaba: ¿cómo puedo ayudar a esta abuela?», dijo Begg, añadiendo que no quería que perdiera a su nieto.
A otra persona en otras circunstancias, dijo, quizá le habría dado un consejo distinto. Sin embargo, no piensa arrepentirse de su consejo, pase lo que pase en las redes sociales.
Begg también dijo que se alegraba de que su consejo a esta abuela —y no sus otros sermones sobre sexualidad— se hubiera hecho viral.
«Porque si tengo que caer de un lado o del otro, caeré de este lado», dijo. «Caeré del lado de la compasión».