Preparemos juntos nuestros corazones durante la temporada previa a la Pascua y mucho más allá. Los acontecimientos ocurridos hace más de 2000 años todavía resuenan en nuestros huesos y cuerpos hoy. La muerte y resurrección de Jesús es la realidad más poderosa de la historia y del mundo, y sigue revelando verdad a nuestras vidas cada día. Depende de nosotros recordar, reflexionar y permanecer en las gloriosas repercusiones cotidianas del amor de Cristo por nosotros, el cual fue revelado a través de su humildad y su poder, la crisis y la victoria, la desesperanza y la desbordante alegría. Él murió y ciertamente resucitó, y eso lo cambia todo: aun los aspectos más pequeños de la vida diaria. Mientras preparamos nuestros corazones, este devocional te invita a recorrer la Cuaresma y la Pascua a través de las diferentes etapas del viaje emocional, así como a la luz de las verdades teológicas de la vida y la muerte, y todo lo que ocurre en el medio.
El devocional Pascua en el día a día está dividido en tres marcos, y cada uno representa una realidad emocional diferente a lo largo del camino pascual. El primer marco nos guía a través de la temporada que en el calendario eclesiástico se conoce como Cuaresma, donde confrontaremos la humilde condición de nuestra humanidad, examinaremos las limitaciones de nuestra condición carnal, y abrazaremos el llamado a una vida de sacrificio, ayuno y abnegación. El segundo marco nos llevará a través de la Semana Santa en preparación para la Pascua, donde vislumbraremos la anticipación de la esperanza. Por último, nos sumergiremos en la turbulencia y la intensidad presentes en la traición a Jesús, su crucifixión, su resurrección y su reencuentro. A lo largo de este recorrido, veremos que el amor y la gloria han vencido el aguijón de la tristeza y la muerte, tanto en el escenario de la eternidad, como en nuestras insignificantes vidas que un día serán halladas en gloria.
Parte 1: La humilde condición de nuestra humanidad