Este artículo fue publicado en colaboración con la Conferencia Nacional del Liderazgo Cristiano Hispano (NHCLC, por sus siglas en inglés).
El octubre pasado, mi vida cambió para siempre.
Estuve casado con mi esposa, Jessica, durante 14 años. Ella era mi compañera en el ministerio, la madre de mis tres hijos increíbles, el amor de mi vida. Luego, en octubre, ocurrió lo inimaginable: Jessica fue a su hogar celestial para estar con el Señor. Y de repente, me encontré en un papel que nunca esperaba representar: un papá soltero.
Mi mentor, el pastor Samuel Rodríguez me dijo: “Eres mamá y papá a esos chicos ahora mismo. Vas a llenar ambos papeles”. Poco a poco, he aprendido a hacerlo. Los despierto para la escuela, les preparo el desayuno, oro por ellos, y me aseguro de que se peinen. Tomo las llamadas del ministerio mientras doblo la ropa. Todavía predico, y sirvo dentro del ministerio de la NHCLC, pero nunca olvidare el reto final de mi esposa para mí, de mantener a nuestros hijos en el primer lugar en mi vida. Me dijo: “Tony, no quiero que nadie más crie a nuestros hijos. Por favor, asegúrate de cuidarlos”.
Una de las formas en que tomo en serio esta responsabilidad es asegurándome de que mis hijos reciban una educación de calidad. La educación de mis hijos es importante para mí, y yo no estoy solo. El Centro de Investigación Pew ha encontrado que “mejorar el sistema educativo” es la prioridad # 1 para los hispanos. Queremos que nuestros hijos tengan altos estándares académicos que los preparen para la universidad y la fuerza laboral. Queremos que nuestros sistemas escolares sean justos, ofreciendo educación igual sin importar el ingreso, origen étnico o código postal.
Pero como padres, especialmente como padres solteros, ¿qué podemos hacer para ayudar a nuestros hijos a obtener la mejor educación posible? En primer lugar, podemos animar a los estudiantes hispanos no sólo a graduarse de la escuela preparatoria, sino a seguir adelante para obtener su título universitario también.
Quiero apoyar la educación de mis hijos siendo un buen modelo para ellos. Por eso he decidido volver a la escuela. Yo no logré obtener un título universitario cuando era más joven, pero voy a hacerlo ahora para poder establecer un gran ejemplo para mis hijos. ¡Les he prometido que me graduaré antes de que lo hagan ellos! ¿Y qué hacemos en esos preciosos años que conducen a la independencia de la universidad? ¿Qué pueden hacer los padres solteros para asegurarse de que sus hijos reciban una educación de calidad?
Podemos:
- Invitar a amigos/familiares a la noche de casa abierta [open house] para que cada niño reciba atención individual.
- Cuando no pueda asistir a eventos escolares especiales, podemos invitar a amigos/familiares que asistan en nuestro lugar.
- Tómese el tiempo para las conferencias de maestros. ¡Son importantes!
- Ser un modelo de aprendizaje a lo largo de la vida leyendo a nuestros hijos, y leyendo por nuestra cuenta.
- Dar a nuestros hijos la oportunidad de conocer a adultos con títulos avanzados, u adultos que fueron los primeros en su familia en asistir a la universidad.
- Lleve a sus niños a obras de teatro, conciertos y eventos en los campus universitarios cercanos para darles una visión para el futuro.
Durante esos años antes de que los niños se vayan a la universidad, los padres solteros tendrán que apoyarse en nuestra familia y amigos para ayudar a apoyar a nuestros hijos en su educación. La gente me dice todo el tiempo, “¡Hombre, estás haciendo un gran trabajo de criar a esos niños!” Pero la verdad es que he tenido un apoyo increíble. Mi suegra ha sido maravillosa. Ella ha entrado en la brecha cuando yo simplemente no podría estar en todas partes a la vez. ¡No tenga miedo de pedir ayuda!
Pasaron unos seis meses entre el diagnóstico de Jessica y su fallecimiento. Recuerdo estar cuidando a los niños y pensar, “ella viene a casa en cualquier momento”. Un poco más tarde me dije, “cariño, ¡nos hemos quedado sin cosas para cocinar! No podemos esperar a que vuelvas a casa porque ya nos cansamos de comer hot dogs. Nunca vamos a comer otro hot dog en nuestra vida”. Luego llega el día en que te das cuenta, ¿sabes qué? Así es la vida. Esta va a ser nuestra vida por un tiempo muy largo.
Nunca pensé que estaría aquí, pero por la gracia de Dios y con el apoyo de amigos y familiares, estoy cumpliendo el papel de papá soltero un día a la vez. Sé que me están observando y aprendiendo de mis opciones y prioridades —por eso es que he prometido obtener mi título de la universidad. Tal vez no sea un modelo ideal en la cocina, pero puedo mostrarles el valor de seguir aprendiendo toda la vida.
Rev. Tony Suarez es vice presidente ejecutivo del National Hispanic Christian Leadership Conference.