Esta traducción fue publicada en colaboración con la Conferencia Nacional de Liderazgo Cristiano Hispano (NHCLC, por sus siglas en inglés).
Última actualización, noviembre 20: Esta noche el presidente Barack Obama delineó su acción ejecutiva sobre reforma migratoria, la cual impactará a 5 millones de inmigrantes. El presidente usó dos citas: una del ex presidente George W. Bush, y la otra de Éxodo 23.
“Las Escrituras nos dicen que no debemos oprimir al extranjero, porque sabemos en carne propia lo que se siente ser extranjero—porque nosotros mismos fuimos extranjeros también,” dijo Obama. “Mis compatriotas americanos, nosotros somos y siempre seremos una nación de inmigrantes. Nosotros fuimos, en algún momento, extranjeros también.”
Las tres partes de su plan son:
- “Edificaremos nuestro progreso en la frontera con recursos adicionales para nuestro cuerpo de seguridad, para que puedan contener el flujo de aquellos que cruzan ilegalmente y el pronto retorno de aquellos que logran cruzar.”
- "Haré más fácil y más rápido el que puedan quedarse y contribuir a nuestra economía los inmigrantes, graduados, y emprendedores con altas habilidades, como lo han propuesto tantos líderes de empresas.”
- “Tomaremos medidas para lidiar responsablemente con los millones de inmigrantes indocumentados que ya viven en nuestro país.”
El tercer punto suscitará mucho debate (Vox hace un resumen de los puntos principales de ambos lados). Para los detalles iniciales de la acción ejecutiva, le recomendamos que lea el discurso completo del presidente y el resumen de la Casa Blanca.
De entre las primeras reacciones, Jenny Yang de World Relief—una de las mujeres seleccionada por CT como “50 mujeres que usted debe conocer” y quien es la coautora de un influyente libro que hace alusión al mismo pasaje del Antiguo Testamento que usó el presidente Obama—dijo que la acción del presidente Obama “sólo proveerá una solución temporal” puesto que el Senado de los EE.UU. “dio el paso correcto en 2013 al aprobar la ley, pero el Congreso no pudo terminar la labor.”
“El Congreso debe ver las acciones del presidente como ímpetus para aprobar lo más pronto posible reformas de inmigración que suplanten la acción ejecutiva,” dijo Yang, vicepresidente de defensa y política de World Relief. “Cada día que esperamos, vemos consecuencias en la familia y los amigos. Lo que necesitamos es una respuesta permanente a un sistema que no funciona. La inmigración es un rasgo definidor en la historia de los Estados Unidos y seguirá siendo un factor importante para el futuro de la nación. El presidente Obama y los miembros de ambos partidos en el Congreso deben escuchar el llamado a no sólo cambiar nuestras leyes sobre migración sino a que dichas leyes se cumplan de manera que sea en el mejor interés de las familias y nuestra nación.”
Sam Rodríguez admitió que la acción ejecutiva de Obama “no era el mecanismo preferido,” pero la describió como “una acción misericordiosa” porque dicha acción “inicia una receta reconciliatoria para abordar una crisis humanitaria de facto dentro de nuestras fronteras: millones de los hijos de Dios creados a su imagen viviendo en las sombras.”
“Por años nuestro gobierno, bajo el liderazgo de ambos partidos, falló miserablemente en lo que tiene que ver con la inmigración,” dijo Rodríguez, presidente de la National Hispanic Christian Leadership Conference. “Por años, nuestros oficiales electos no dieron la medida en obrar redentoramente. Por años, nosotros como nación miramos, sin hacer nada, mientras las familias experimentaban separación, los niños sufrían, y la unidad nacional quedaba hecha añicos.”
“Como una organización comprometida tanto con la compasión cristiana como con el cumplimiento de la ley, hacemos un llamado al Congreso y al presidente Obama para que inmediatamente trabajen juntos en aprobar legislación que asegure permanentemente nuestras fronteras, que proteja nuestros valores, y que facilite una plataforma sobre la que una vez más podamos brillar como una ‘ciudad en la cima de una montaña,’” continuó Rodríguez. “Al unirnos en la inmigración podemos; mejor aún, brillaremos otra vez.”
Entre tanto, Rusell Moore explicó por qué está de acuerdo en reformar el “incoherente e injusto” sistema migratorio de los Estados Unidos, pero por qué está en desacuerdo con la decisión de Obama de “obrar unilateralmente.”
“En más de una ocasión, le pedí al presidente Obama que no convirtiera la reforma migratoria en un asunto de estado azul vs estado rojo,” dijo Moore, presidente de Ethics and Religious Liberty Commission. “Le pedí que no actuara unilateralmente, sino que trabajara por llegar a un consenso a través del proceso legislativo. Obrar unilateralmente amenaza dicho consenso, y es hacer la cosa equivocada.”
“Mi esperanza es que los republicanos en el Congreso no permitan que las acciones del presidente sobre este asunto se vuelvan un pretexto para permanecer en el estancamiento del statu quo,” continuó. “Y aún más importante, ruego que nuestras iglesias trasciendan estas posturas y maniobras que vemos en Washington. No importa los acuerdos o desacuerdos que tengamos sobre la política migratoria; nosotros, como el Cuerpo de Cristo, somos los que vemos a cada ser humano reflejando la imagen de Dios.”
Noel Castellanos por mucho tiempo le “ha rogado al Congreso que componga el roto sistema migratorio usando como fundamento los principios bíblicos de amor al prójimo y de dignidad humana,” así que aplaudió a Obama por “cumplir su promesa de dar alivio.”
“Ahora es el momento para que el Congreso termine la labor de aprobar una reforma migratoria completa,” dijo el director ejecutivo y presidente del Christian Community Development Association. “Nuestra nación en su totalidad, y nuestras comunidades de inmigrantes en particular, están en una necesidad desesperada de acción decisiva sobre la inmigración que impactará el bienestar de nuestra nación por generaciones en los años venideros.”
Leith Anderson reconoció que mientras que el “anuncio del presidente parece ofrecer ayuda temporal importante para muchas familias, no es un substituto para una acción del Congreso que arregle completamente nuestro roto sistema migratorio.”
“Los líderes del Congreso—tanto los que aplauden al presidente como los que se oponen a sus acciones—deben unirse para negociar soluciones bipartitas. Llamamos a los dos lados a reducir la retórica y a ponerse a trabajar,” dijo el presidente del National Association of Evangelicals.
David Beckman dijo que su “apoyo a la acción del presidente no es sobre política partisana.”
“Es sobre millones de familias que tendrán un respiro de la preocupación y nuevas oportunidades para trabajar y tratar de salir de su pobreza,” dijo el presidente de Bread for the World. “Es sobre nuestra fe; la Biblia es muy clara sobre cómo debemos tratar al inmigrante. Es una parte de nuestro compromiso a favor de la oportunidad para todo mundo.”
CT ha visto previamente cómo se aplican los versículos Bíblicos sobre “recibir al extranjero” al debate sobre la inmigración, y también ha hecho una reseña del libro del mismo nombre escrito por Yan y Matthew Soerens, como parte del reportaje sobre la reforma migratoria. Her.meneutics aborda el tema de qué hacer cuando usted no sabe el estatus migratorio de alguna familia. (Todos estos recursos son en inglés).